viernes, 6 de mayo de 2011

Por Amor al Béisbol

El Béisbol me ha acompañado desde que tengo uso de razón. Comencé cuando tenía 6 años, ni bien entraba al Kinder y yo ya estaba en un campo de tierra lanzando una pelota y agarrando con mis manos un bate. Debió haber sido una gran sensación, digo debió, porque no recuerdo exactamente lo que sentía en ese momento. Pero estoy seguro que en mi rostro se dibujaba una sonrisa inigualable.


Mi primer y único equipo durante toda mi carrera juvenil fue Piratas, gran equipo, gran organización, grandes recuerdos. Una directiva comprometida a que un grupo de muchachos hagan deporte, sin saber, que en unos años después este deporte se empiece a jugar en todos los rincones de Guayaquil. Y peor aún, sin saber, que sería Piratas un equipo muy exitoso en todas sus divisiones.


Que increíbles recuerdos! Como yo esperaba ansiosamente los días Lunes, Miércoles y Viernes en los que practicábamos. Miraba el reloj a cada momento esperando sean las 4:30 pm para empezar a entrenar. Y que desánimos me daban cuando ya eran las 6pm, final del entrenamiento.


Me formaron con una disciplina tremenda. El entrenador, en ese tiempo, Frank Maridueña y muchos otros, decían a correr 5 vueltas a la cancha, y yo salía soplado. Sin ninguna queja. Mientras otros, lloraban o trataban de negociar menos vueltas. Esos nunca fueron sobre salientes en el béisbol, iban porque sus padres los obligaban a hacer una actividad deportiva por las tardes. Y lo que no sabían es que uno tiene que amar lo que hace para jugar con ganas.
Pasaron muchos años, tuve muchísimos compañeros, tuve algunos entrenadores, pero un sola cancha y un solo club, Club deportivo Piratas.


Que sensación tan espectacular jugar partidos de campeonato en la Liga Miraflores, sábados y domingos, la liga repleta de padres de familia acudiendo a ver a sus grandes estrellas. Unos anhelando que sus hijos sobre salgan del resto, otros por tener un programa el fin de semana y por que no, otros pensando en si su hijo pudiera llegar algún día a jugar Grandes Ligas en USA.


Mi generación no fue la mejor dentro de Piratas, la imbatible era la de mi hermano Fabricio, 3 años mayor que yo. Ellos solo quedaban campeones y lograban grandes reconocimientos. Viajaban a Venezuela, El Caribe y visitaron durante Spring Trainning a los Piratas de Pittsburgh en la Florida. Ahí conocieron al gran catcher Tony Peña, quien es hoy parte del cuerpo técnico de los NY Yankees.


Nunca quedé campeón, pero siempre me gané los premios al mejor bateador, Home Runs, carreras empujadas, mejor pitcher, jugador más disciplinado y tantos más. Quizás una de mis pocas frustraciones en mi vida fue no quedar campeón con Piratas en béisbol.


Terminé el colegio, terminó mi carrera juvenil en Miraflores. Jugué 3 años en el Yeyo Uraga en un par de equipos, pero al corto tiempo dejé de jugar.


Desde aquel tiempo me dediqué a jugar Softball. Empecé jugando en algunos equipos hasta que decidimos mi hermano y yo en sacar Piratas en Softball. Así fue, a los pocos años sacamos Piratas, invitamos a todas las grandes figuras que jugaron béisbol en el club. Y como era de esperarse, quedamos campeones!! sueño cumplido! fuimos imbatibles 18 juegos ganados, 2 perdidos. Barrimos la final.


¿El recuerdo más grato? un miércoles iluminado en la liga Kennedy jugando con el equipo Parmalat, esa noche pegué 4 Home Runs, empujé 10 carreras y anoté 5.


Durante mi infancia y por influencia de mi hermano fui fanático de los Mets, pero luego empecé a comprender mejor la pelota chica y empezó mi fanatismo por los Yankees, equipo al cual vengo siguiendo por muchos años y al cual cada vez me siento más aferrado.


Unos años después armé mi propio equipo de Softball, esta vez se llamó Yankees. invité a todos mis grandes amigos peloteros de Piratas, volvimos a quedar campeones!


Durante mi carrera de Softball he jugado en equipos en muchos equipos, los que recuerdo: Piratas, Yankees, Parmalat, Reebook, Bomberos (grandes recuerdos), De León, Rojos, Indios, Fatty, Dragons, etc.


El "Béisbol", es sin duda, el deporte de mi vida, porque me trajo grandes momentos, grandes amigos, gran fanatismo, una gran disciplina deportiva y de formación, y porque me llevó a ser lo que soy hoy.


Lo pienso muy a menudo y estoy seguro, que si en este país habrían existido (en aquella época mía de desarrollo) más apoyo y recursos para el deporte, estuviera jugando a mis 35 años de edad en algún equipo de las grandes ligas. Quizá esta puede ser mi mayor frustración!
Pero las cosas por algo se dan así, vivo en Guayaquil y tengo una familia espectacular, una esposa incondicional y dos lindos hijos; mejores que los Yankees de NY.


Hoy sigo jugando softball y espero poder hacerlo hasta más no poder. Sueño en un futuro muy cercano ser el "Personal Tranning" de Juan Carlitos y enseñarle sobre todo disciplina.


Por esto y muchos más, esto lo hago, "Por amor al béisbol".


Bienvenidos a mi Blog donde solo se habla y se opina de Béisbol. Espero compartir mucho de mis conocimientos y recibir un feedback importante por parte de ustedes.


Juan Carlos Amador Bayas.

2 comentarios:

  1. Juan Carlos, buena iniciativa la de crear este blog.
    Comparto mucho tu sentimiento hacia este gran deporte.

    Simpática tu historia. La mía, pese a tener gran trayectoria, es más corta que la tuya en cuanto al baseball, ya que yo viví mi infancia en Salinas y sólo tuve la oportunidad de jugar recién desde los 10 años en Majis de Salinas, con el entrenador Juan Vintimilla.En los pocos años que me entrenó, me enseñó todo lo que hoy sé.

    Lastimosamente yo jugué baseball sólo hasta los 19 años y con paras de por medio. Terminé jugando en Cardenales recuerdo.

    Tuve la oportunidad de jugar en el equipo del condado Red Lake County, en Red Lake Falls, Minnesota en 1995 cuando me fui a graduar del colegio por allá. Logramos llegar al campeonato estatal y tuvimos la oportunidad de conocer el estadio de los Twins. Una gran experiencia. Definitivamente otro nivel y disciplina.

    Luego al igual que tu, me dediqué a jugar softball modalidad abierta, como se jugaba en la península. Siempre iban equipos extranjeros llevando los conocimientos del pitcheo.: molinete, fuetazo, entre otros.

    Mi primer equipo fue Jets. Y ahora que lo recuerdo, una vez en un federativo creo que nos enfrentamos en Salinas, si no me equivoco jaja.

    Jugué también en Gigantes del Pacífico. Luego saqué mi propio equipo también en Salinas, "Padres".Un buen equipo en aquel entonces, que hizo mucho en poco tiempo. Fuimos los únicos tricampeones en el torneo abierto dominical en la península con pitchers extranjeros.

    Con el paso del tiempo el equipo se fue debilitando poco a poco. Unos no volvieron a jugar más, otros se oxidaron, otros ni hablar.

    Luego vine a Guayaquil, donde tuve la oportunidad de jugar en varios equipos, entre ellos: Drink Team, Star Mart, ADN, Mac Jeans, Romanos, Padres (en un mal intento de volver a unir el equipo y hacer buen papel), Inquilinos, D’ Leon, Fatty (en estos 2 últimos fuimos compañeros).

    El mejor recuerdo en mi primer partido en Guayaquil fue el partido contra Sarcuni.
    Yo siempre he sido 3er bate. Pero al llegar a este nuevo equipo Drink Team, al no conocerme mucho, me ponen de primer bate.
    Fue una sensación increíble ver como luego de batear la bola lanzada por Polit, fue a dar detrás de las bardas (que en ese tiempo aún existían, cuando en la Kennedy se jugaba buena pelota).

    Ahí estaba mi primer homerun en mi primer turno en mi primer partido en Guayaquil. Son cosas que uno nunca olvida y que te producen esa sensación de satisfacción, de orgullo, de gloria.
    Luego en mi segundo turno habían bases llenas y me tocaba al bate. Mi primer Grand Slam, no te puedo describir lo que sentí. Pero seguramente tu lo sabes!
    Bueno de todas formas perdimos ese partido pero no recuerdo el marcador.

    Cuando jugué en la liga de Salinas quedamos campeones del Campeonato Interligas, venciendo a Liga Kennedy, Miraflores y Liga del Sur.

    Tuve también la oportunidad de formar parte en la selección de la península, en la nacional por varios años, pero lastimosamente por falta de organización y fondos, se viajó pocas veces al exterior.

    Comparto contigo el tema de la pasión por este deporte, de la hermandad que existe entre los jugadores y compañeros de equipo.

    Hoy en día sigo jugando también, aunque por ahora no estoy en ningún equipo. Así que si sabes de alguno me avisas. A ver si volvemos a jugar juntos.

    Creo que me emocioné jaja. Me fui de largo, pero creo que es justamente eso a lo que te refieres. Podríamos pasar días enteros contando anécdotas y logros de este gran deporte.

    Definitivamente el baseball es lo máximo!, y lo jugaré hasta que el cuerpo me lo permita!

    Un abrazo

    Julián Robles

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  2. esta lindo cuni, hasta casi lloro! jaja
    pero ensenales a tus "fans" a comentar
    por aqui y no llenarme el mail con sus comentarios..

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